Los quiroprácticos realizan diagnósticos para entender lo que está sucediendo con la biomecánica de tu cuerpo. Determinar que una pierna es más corta que la otra o que un lado de tu cuerpo pesa más, le ayuda a entender lo que está sucediendo en tu cuello, columna vertebral o caderas. El Dr. Kinnison puede usar esa información para determinar el tipo de ajuste que tu cuerpo necesita.

Los problemas en la columna vertebral pueden causar distribución irregular del peso, que afecta a tu equilibrio y postura. Algunos quiroprácticos utilizan básculas bilaterales (dos escalas) para determinar si el peso del paciente es el mismo en los dos lados. Si un problema en tu cuello está causando que tu cabeza gire a la derecha, tu lado derecho será más pesado.

Comprobar la longitud de una pierna cuando el paciente esta acostado boca abajo, en la camilla de ajuste, puede determinar si una pierna es más corta que la otra. Tal vez la cadera esté desalineada. O tal vez la interferencia del nervio en la zona lumbar está causando la aparición de una pierna corta (contraída). Ajustar la cadera o la parte baja posterior mueve las vértebras a la posición adecuada, alivia la presión del nervio y corrige la pierna más corta, por lo que ambas piernas estarán al mismo nivel.

Mírate al espejo. ¿Tu cuerpo parece recto o está inclinado hacia un lado? ¿Uno de los bajos de tu pantalón es más largo que el otro? Un simple ajuste puede ser todo lo que necesitas para corregirlo. En nuestra consulta siempre realizamos ajustes precisos que aportan tranquilidad en todo el organismo.

Comienzas con un estornudo, tos o carraspera y un buen amigo o colega te sugiere: “toma Vitamina C antes de que empeore.” Así que tomas una mega dosis de Vitamina C con la esperanza de evitar una enfermedad mayor.

Pero ¿Este suplemento de Vitamina C es realmente importante?

En la década de los años 30, el Dr. Albert Szent-Gyorgi, un bioquímico húngaro, ganó el Premio Nobel de medicina por identificar los beneficios de la Vitamina C. Durante su investigación, separó la molécula de ácido ascórbico (el ingrediente principal de los suplementos de Vitamina C), pero concluyó claramente que consumir alimentos ricos en vitamina C y recibir los beneficios de la vitamina C en su forma natural, era muy superior a tomar un complemento sintético.

El ácido ascórbico NO es Vitamina C.

Para obtener los beneficios de la Vitamina C, tienes que tomarla como un complejo completo, que no puede ser creado en un laboratorio. El Dr. Royal Lee, a veces llamado el “Einstein de la nutrición”, ha investigado extensivamente la diferencia entre complejos de vitamina natural, que se encuentran en los alimentos, y compuestos sintéticos que contienen factores aislados de la vitamina. Simplemente no son lo mismo.

No se trata de quitar méritos a los suplementos. Pero es importante saber distinguir entre lo que parece una verdad y lo que es realmente verdad.

La vieja amonestación sobre nadar después de comer tiene un pequeño grano de verdad, especialmente para el nadador profesional. Pero, para la mayoría de nosotros que simplemente chapoteamos o flotamos, tener el estómago lleno no nos hará daño ni un poco.

Si bien es cierto que la digestión desvía grandes cantidades de sangre hacia el estómago, lo que teóricamente puede causar calambres durante el esfuerzo vigoroso, nadar a un nivel normal después de una comida ligera no representa un peligro apreciable.

En su lugar, concéntrese en las preocupaciones mucho más parecidas, como contraer el oído del nadador, una infección del canal auditivo o el peligro aún más grave de los accidentes de buceo.

Al saltar al agua desconocida, recuerde el lema “Pies primero la primera vez”.

Mientras estés en la playa, no te sumerjas hacia el fondo de las olas que se aproximan o de espaldas a ellas.

Siempre bodysurf con las manos delante de usted.

Nunca se sumerja en aguas desconocidas.

Tres cuartas partes de todos los accidentes de buceo ocurren en cuerpos naturales de agua.

Mientras esté en una piscina, pruebe el resorte de una tabla de buceo antes de usarla. Bucear fuera de su lado es peligroso; solo sumérgete de frente y nunca en una piscina sobre el suelo o en el extremo poco profundo. ¡Nueve de cada diez lesiones de buceo ocurren en seis pies de agua o menos … con el estómago vacío!

 

 

Existen estudios recientes que afirman que la crema solar tiene poco efecto a la hora de protegernos de un cáncer de piel. De hecho, la Agencia Internacional de Investigación para el Cáncer afirma lo siguiente:

• El uso de la crema solar reduce la aparición de carcinoma de células escamosas, una variante de cáncer que crece lentamente y que es tratable, pero que desemboca en un 16% en cáncer de piel.
• El uso de la crema solar no tiene influencia alguna demostrada sobre el carcinoma celular basal, la variante más común de cáncer de piel, un 80% de los casos desemboca en ello.
• Cuando uno se queda en el exterior más tiempo, debido a que se ha untado con crema solar, incrementa el riesgo de sufrir melanoma, la variante más mortal de cáncer de piel.

El Dr. Joseph Mercola, un reconocido médico osteópata, promueve la exposición solar para la absorción de la vitamina D. La crema solar interfiere en nuestra habilidad de absorber dicha vitamina, que promueve la salud cardiovascular, proporciona una presión sanguínea óptima, mantiene bajos los niveles de colesterol, ayuda a mantener un sistema inmunitario sano, mantiene sanos nuestros riñones y ayuda a conservar unos huesos fuertes. Sin embargo, si has de utilizar crema solar evita cualquiera que contenga los siguientes ingredientes químicos:

 

• Ácido para amino benzoico.
• Octil salicilato
• Avobenzono
• Oxibenzona
• Cinoxato
• Padimato O
• Dioxibenzona
• Fenibenzimidazol
• Homosolato
• Sulisobenzona
• Mentilo atranilato
• Salicilato de trolamina
• Octocrileno
• Dioxibenzona

Tanto la crema solar como el sol pueden dañar tu piel. Asegúrate de protegerte de ambos.

Entre el uno y tres por ciento de nuestra masa corporal total está constituida por diversas bacterias y microbios. La falta de equilibrio simbiótico correcto de bacterias en nuestro tracto intestinal puede producir una variedad de problemas de salud. Entre ellos: el síndrome del intestino irritable, diarrea e incluso el resfriado común.

Actualmente hay una mayor conciencia de la importancia de los probióticos, sobre todo después de tomar un antibiótico que mata bacterias “buenas” junto con las malas.

Una estrategia común para la restauración de la combinación adecuada de microorganismos en nuestro intestino ha sido introducir Lactobacillus acidophilus, por lo general, con el consumo de yogur. Desafortunadamente, ¡la mayoría de los yogures contienen tanto azúcar como un pastel! Este azúcar sirve para alimentar la flora patógena que precisamente queremos combatir; bacterias, levaduras y hongos.

Es por eso que muchos están recurriendo a los alimentos fermentados como el chucrut, el kéfir, kombucha e incluso ciertos quesos curados. Por supuesto, muchos de los alimentos fermentados disponibles en el mercado han sido pasteurizados, comprometiendo parte de su beneficio.

Los alimentos fermentados son aquellos que han pasado por un proceso en el que las bacterias naturales se alimentan del azúcar y el almidón creando ácido láctico. Este proceso preserva la comida, y crea enzimas beneficiosas, las B-vitaminas, ácidos grasos Omega-3 y varias cepas de probióticos beneficiosos.

Entonces, ¿qué hacer ante los problemas digestivos? Además de ajustarse con regularidad para asegurarse el control adecuado del sistema nervioso de tu tracto intestinal, busca más información sobre la fermentación de los alimentos y recetas para preparar con ellos.