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Conducir una columna desalineada

Alguna vez hemos visto a alguien con la rueda delantera de la bici entre las piernas intentando alinearla después de una caída. Enderezar el manillar suele ser más difícil así que la opción es circular con el manillar torcido aunque ello incremente el riesgo de volver a tener un accidente.

Columna_Desalineada

Después de que tu cuerpo ha sufrido un estrés, por ejemplo, levantaste un gran peso de forma incorrecta, te quedaste dormido en el sofá o pasaste ocho horas sentado frente al ordenador, es probable que tu columna vertebral también se hallé fuera de alineación. Una postura saludable requiere que la cabeza, los hombros, las caderas y los pies estén alineados correctamente para que la columna vertebral pueda mantener la integridad funcional, al igual que el manillar de una bicicleta tiene que alinearse con la horquilla y los neumáticos para poder conducirla con seguridad. Si una parte de una estructura mecánica se desalinea, como tu cabeza no está en equilibrio sobre los hombros o las caderas no están equilibradas sobre los pies, se creará tensión indebida en el resto del sistema y aumenta el riesgo de fallo o situación de crisis.

Si conduciendo una bici con el manillar torcido te sentirías incómodo, imagínate cómo se sienten tus músculos, articulaciones y ligamentos cuando intentan realizar actividades cotidianas, con una columna desalineada. Tal vez las molestias que sientes te están diciendo “… es el momento de visitar al quiropráctico para conseguir enderezar mi columna!”

No olvides tu ajuste…

A veces sucede que las personas se olvidan de seguir su cuidado quiropráctico tan pronto como el dolor desaparece, para regresar unos meses después preguntándose qué hicieron para que vuelva el dolor. En la mayoría de los casos no es tanto lo que hicieron lo que provocó que el dolor regresara, es lo que dejaron de hacer.

NoOlvidesTuAjuste

Una vez que desaparecen los síntomas, pensamos que ya estamos sanos y es fácil olvidarse de seguir la rutina que nos hizo mejorar. Es habitual que después de hacer dieta y mejorar nuestros hábitos alimenticios consigamos perder unos kilos que, en cuanto volvemos a descuidar nuestros hábitos, se recuperan rápidamente. Lo mismo vale para mantener tu columna vertebral sana con la atención quiropráctica regular. Cuando el dolor se ha ido y la vitalidad ha vuelto es fácil olvidar el impacto que tiene un sistema nervioso despejado sobre tu salud en general. Si abandonas el cuidado quiropráctico por mucho tiempo será más difícil recuperar las mejoras. Lo ideal es seguir un programa de mantenimiento.

Cuando tus antiguos dolores y molestias reaparecen, en lugar de tratar de averiguar lo que hiciste que provocó de nuevo la crisis, recuerda lo que estabas haciendo y permitió que tu cuerpo expresara la inteligencia innata que sabe como auto repararse.

Después de la caída…

De acuerdo con el padre de la Quiropráctica, BJ Palmer, un resbalón y caída en una acera puede parecer una cosa pequeña. Pero la cascada de eventos invisibles que provoca, puede conducirte a mayores problemas en el futuro.

TraslaCaída

El resbalón, por insignificante que sea, provoca una sacudida inesperada en la columna vertebral; vértebras desalineadas o subluxaciones, presión sobre uno o varios nervios, tejidos que se ven privados de una buena comunicación, mal funcionamiento fisiológico. El potencial del cuerpo se ve mermado, la enfermedad encuentra el medio ideal para desarrollarse y el curso de la vida se ve alterado. Todo por un instante aparentemente intrascendente, a menos que se remedie cuanto antes mejor.

No importa lo insignificante sea el resbalón, tu quiropráctico preferirá evaluar de inmediato para estar seguros. No sólo puede ajustar la desalineación, si no que, el hecho de corregir las subluxaciones pronto, frustra las interrupciones en la calidad de tu día a día y, en consecuencia probablemente, también la tus seres cercanos. Después de una caída, por favor acude cuanto antes a un control quiropráctico.

Constancia y repetición

Quién no recuerda haber pasado alguna noche sin dormir preparando un examen importante: intentar asimilar todo un semestre de trabajo en unas pocas horas, ¡una verdadera maratón sin parar de estudiar! Pero cuando se trata de salud y quiropráctica, esto no funciona así.

Constancia_Repetición

Probablemente nos gustaría acudir al quiropráctico, después de años de dolores y problemas de salud, y que una sola sesión bastara para borrar estos síntomas. Pero al igual que asimilar los conceptos para un examen en un solo día, un trabajo de alivio quiropráctico para salvar la situación, también es temporal. Ajustes de última hora para problemas de larga duración siempre darán resultados fugaces. Se necesita repetición sostenida, atención constante en el tiempo para conseguir cambios medibles en columnas vertebrales largamente subluxadas.

Sería una equivocación pensar que podemos recuperar nuestra curva cervical o minimizar los efectos de años de pobre movilidad espinal con una sobredosis puntual de quiropráctica. En salud no vale actuar así, se requiere constancia y repetición para mantener la integridad de tu espalda.

Un cepo en tu columna

Te despertaste esta mañana y al levantarte de la cama, descubres que tu espalda está completamente bloqueada como si un cepo le impidiera moverse. Tal vez entonces, pienses que deberías haber prestado más atención a las señales de advertencia que se fueron acumulando en los últimos meses.

Cepo_Columna

La negligencia es enemigo del funcionamiento normal. Piensa en esa pequeña punzada en la espalda que sentiste hace unos días o en el dolor por la mañana que has tenido cada vez más frecuente, como en las advertencias que te manda tu cuerpo. Es como las multas de estacionamiento de las que no haces caso hasta que te encuentras con una penalización mayor. Si sigues ignorando las “multas” o avisos no debes sorprenderte si un día te encuentras con que toda tu columna se ha bloqueado y queda fuera de servicio. Eso es lo que sucede cuando las subluxaciones van sin control y sin ser corregidas.

Así que la moraleja de esta historia es no esperar a que tus problemas de la columna vertebral se te escapen de las manos antes de hacer algo al respecto. El cuerpo y tu columna te avisan, sé responsable y cuida las subluxaciones de tu columna ahora, antes de que ocasionen problemas mayores en el futuro.